Sentir la vida

A veces pasa la vida
en un sueño
a veces suenan campanas
y remueven el cielo.

Pasamos la vida
como si todo esto
no mereciera la pena
solo estar o serlo

Sin embargo
a veces los dueños
de estos miedos
abrazan la vida
y devuelven el precio.

Envuelven los ojos
de la luz de un misterio
el halo de tu pelo
la piel de tu cuerpo

Soñar despierto
vivir deprisa
soltar en un beso
todo aquello
por lo que siempre fuimos
y seremos eternos.

La gracia que nos dio la vida
no tiene precio
más vale escalar montañas
subir al cielo
que caer en un precipicio
de largos y eternos silencios.

Luchar los preludios e intermedios
respirar el aire
que aspira por la ventana
y situar tus alas
entre luces y el sueño

Que nunca acaba
la vida remata
y es capaz de hacernos
devorar las pisadas
de ese momento eterno
que sentimos entre
el momento de la llama
el rayo y el trueno.